La localidad mexicana de Nacualpan y la pontevedresa de O Porriño lloran la muerte de Sergio Fernández, gallego asentado en tierras mexicanas, que fue asesinado a tiros porque no quiso entregar la camioneta que un par de atracadores le quisieron robar.
El suceso tuvo lugar ayer, tal y como informó la prensa mexicana, cuando este hombre de 39 años, culturista y regente de un gimnasio en México, fue atracado a las puertas de su negocio, en la colonia de Huertas.
Sergio Fernández era conocido en O Porriño, donde regentó un pub, y muy querido en Nacualpab, donde ejercía de entrenador personal y daba consejos sobre culturismo en las redes sociales.
Entre medias había vivido en Valencia, Finlandia y Dubai.
Deja esposa y un hijo pequeño, según explica su propia familia en redes sociales, donde anuncian que el entierro tendría lugar en Funerales San Juan Izcalli.
