jueves. 28.03.2024

Los movimientos sociales y culturales que se vienen gestando en el mundo islámico desde la decadencia del Imperio Otomano demuestran que "el yihadismo no es un fenómeno reciente", según la historiadora, periodista y escritora kurdo-viguesa Yashmina Shawki. En una conferencia que ha impartido hoy en la Universidad de Vigo, esta experta ha explicado que el yihadismo significa etimológicamente "esfuerzo" o "lucha" y que existen dos formas de entenderlo. Una es la lucha interior para convertirse en un musulmán ejemplar, y la otra, la lucha externa contra todo lo aquello no es musulmán.

 

La segunda interpretación es la que realizan el Estado Islámico, Al Qaeda o los Hermanos Musulmanes, autores del primer acto terrorista en nombre del Islam con el asesinato en 1948 del primer ministro egipcio, Mahmoud an-Nukrashi Pasha. "El Islam significa sumisión", ha dicho Shawki, y los partidos musulmanes son "propiamente contrarios a las democracias", ha sentenciado la experta. Para explicar el concepto de yihadismo tal y como se conoce hoy, Shawki se ha remontado a la decadencia del Imperio Otomano, origen de una serie de movimientos intelectuales que pretendían reconfigurar la ideología islámica.

 

La pobreza de un país desestructurado, la ausencia de cuerpos de seguridad estatales eficaces y la utilización de la bandera religiosa como justificación ideológica son algunos de los motivos que, según Shawki, gestaron el nacimiento de las bandas terroristas que empezaron a actuar en la década de los 90 del siglo pasado contra el modernismo intelectual de la cultura occidental.

 

Según esta experta, hay tres tipos de yihadistas: los ideológicos, jóvenes de segunda o tercera generación de emigrantes muy influenciables por los líderes religiosos; los oportunistas, que ven en el Islam una forma de comercio y fuente de dinero; y los forzados, aquellos atrapados en un territorio del que no pueden escapar y deben elegir entre "luchar o morir".

 

Sobre la captación de jóvenes para afiliarse a movimientos terroristas islámicos, ha pedido a estos que reflexionen sobre el problema y que acudan al núcleo del mensaje pacificador del Corán, el Salam. También les ha invitado a que recapaciten sobre los causantes de la situación actual del mundo musulmán, algo que "no es exclusivamente culpa del mundo occidental", ha concluido.

Una experta ahonda en orígenes del yihadismo, un fenómeno que "no es reciente"