De entre todas las historias con las que han llegado estos días cientos de inmigrantes, la más estremecedora es la de una pequeña, bautizada por la Cruz Roja como Princesa que viajaba sin sus padres en una de las embarcaciones hinchables rescatadas en aguas del Estrecho. Princesa, como han apodado a la pequeña, llegó a Tarifa sin sus padres en una embarcación hinchable.
Según el relato de otros inmigrantes, los padres de la niña no pudieron embarcar al verse envueltos en un forcejeo con la policía marroquí. Empapada y con una décimas de fiebre fue recogida en una lancha de rescate. Durmió varias horas antes de tomar 2 biberones de leche y ya la llaman 'Princesa' de manera cariñosa.
La Policía Autonómica, siguiendo las indicaciones de la Delegación de Asuntos Sociales de la Junta de Andalucía, ha entregado a una familia de acogida el bebé. En su nuevo hogar, esperará a reencontrarse con su familia de siempre.
Las ONG dan por hecho que debe ser su madre la que venga a buscarla. El Gobierno andaluz asegura que la decisión de buscar una familia de acogida provisional obedece a preservar el bienestar de la pequeña.
