El Ayuntamiento de Ourense prevé un "año complejo" para resolver proyectos pendientes como es la aprobación de un plan urbanístico, tras la caída del PGOM de 2003, y la aprobación de los presupuestos, tras más de dos años prorrogados, tal y como ha reconocido el alcalde, Jesús Vázquez. A preguntas de los periodistas, Vázquez Abad ha asegurado que, en ambos casos, el gobierno ya ha puesto "encima de la mesa" sus cartas y ha aclarado que también ha mostrado "las posibles alternativas" para resolver los temas pendientes.
En lo que se refiere al PGOM, ha apuntado que en este momento no hay "ningún avance", a la espera de que el Tribunal Supremo resuelva el recurso de casación presentado tras la caída de la normativa provisional. En todo caso, ha insistido en que el documento que se debatirá con el resto de grupos políticos es "el mismo" que aprobó el PSOE, en la anterior legislatura, con algunas modificaciones a fin de "dar solución a alegaciones y cuestiones que se presentaron por los vecinos", como los fuera de ordenación, o una mayor edificación en perímetros rurales. Por el momento, el gobierno municipal sigue pendiente de abonar los 90.000 euros a la empresa redactora del plan, para que elabore el texto refundido, algo que no se podrá realizar hasta que se cierre el ejercicio contable.
Sobre este pago, ha recordado que la modificación de crédito que daba luz verde al abono de dicha cantidad salió adelante de forma "tardía" impidiendo abonar dicho pago en tiempo y forma, aunque ha precisado que el grupo de gobierno mantiene "reuniones frecuentes" con la empresa para sacar adelante el nuevo documento. Además, se ha remitido a la junta de área para debatir las oportunas modificaciones al plan, de forma privada, con el fin de no "entorpecer esas negociaciones".