En las últimas semanas, la provincia de Ourense ha sido testigo de un preocupante aumento en los casos de menores al volante. La Guardia Civil de Ourense ha registrado seis incidentes en los que menores, algunos de ellos de tan solo 13 años, han sido encontrados conduciendo en áreas públicas y privadas.
El caso más reciente tuvo lugar en una parcela del parque industrial de San Cibrao das Viñas, donde los agentes descubrieron a una niña de 13 años manejando un vehículo mientras su padre se encontraba en el asiento del pasajero, dándole instrucciones. Este padre está siendo investigado por cometer un delito contra la seguridad en el tráfico, un recordatorio severo de las consecuencias legales que enfrentan aquellos que permiten que menores conduzcan vehículos.
Las autoridades advierten sobre las sanciones, que pueden incluir multas económicas de hasta 3.000 euros y penas de cárcel para los adultos responsables de permitir que los menores conduzcan ilegalmente. Además de las consecuencias legales, enseñar a los hijos a conducir en lugares públicos y abiertos al tráfico puede tener repercusiones fatales.
Es fundamental enfatizar la importancia de acudir a un centro autorizado para aprender a conducir, donde profesionales cualificados pueden proporcionar una educación adecuada sobre seguridad vial.