La noche del 23 de septiembre, una llamada al 112 desde Verín (Ourense) generó una gran movilización de recursos de emergencia. Una mujer, asegurando que un familiar suyo había sido atropellado por un camión y había fallecido instantáneamente, alertó a los servicios de emergencia. Inmediatamente, patrullas de la Guardia Civil, camiones de bomberos y una ambulancia fueron enviados al lugar del supuesto accidente.
Sin embargo, cuando los profesionales llegaron al lugar indicado, no encontraron ni rastro del accidente. Sorprendentemente, tampoco había testigos oculares que pudieran confirmar el incidente. Los agentes sospecharon que la llamada podía ser falsa y que el accidente nunca había ocurrido. Después de varios intentos fallidos para volver a contactar a la persona que realizó la llamada, la Guardia Civil inició una investigación.
Finalmente, los investigadores localizaron a la mujer responsable de la llamada fraudulenta, que resultó ser la titular de la línea telefónica desde donde se hizo la comunicación. Aunque los motivos detrás de esta falsa alerta aún no se han revelado, la mujer ha sido denunciada por infringir la ley de emergencias de Galicia. Dependiendo de la gravedad de su conducta, podría enfrentar multas significativas, llegando hasta los 15,000 euros, advirtiendo así a otros posibles infractores sobre las consecuencias de tales acciones fraudulentas y peligrosas.