viernes. 29.03.2024

Un pediatra que atendió de urgencia al bebé de diez meses ingresado en estado muy grave en el complejo hospitalario de Ourense, supuesta víctima de maltrato, ha declarado este jueves que no apreció "nada raro" en el menor al hacerle una exploración. Según indicaron fuentes de la defensa de los imputados, el pediatra, que había visto al bebé por urgencias en su centro de salud sólo tres días antes de que ingresase en el hospital, manifestó ante el juez que no apreció nada fuera de lo normal en la exploración que le practicó a raíz de "un proceso catarral".

 

El juez de Instrucción número 1 de Ourense tomó esta mañana declaración a un nuevo testigo en la causa que investiga el origen de diversas fracturas y contusiones detectadas por los servicios médicos del Complexo Hospitalario Universitario de Ourense, en las costillas y otras partes del cuerpo, unos hechos por los que han resultado imputados ocho miembros del entorno familiar del menor, entre ellos los padres.

 

Las diligencias penales se instruyen por un posible delito de homicidio en grado de tentativa en base a las últimas pruebas médicas que han determinado la gravedad de las lesiones que tenía el pequeño. A este respecto, el pediatra comentó que la hemorragia del ojo y en la nariz podían deberse al "propio esfuerzo" realizado a raíz del catarro, motivo por el que no le llegó a dar mayor importancia a este hecho, ha detallado la letrada Lourdes Cacharrón.

 

En cuanto a las lesiones más graves, precisó que si están consolidadas puede que el bebé no manifieste dolor, motivo que hace más difícil detectarlas, según abundó la abogada. El día del ingreso en el hospital, el bebé presentaba una lesión en la cabeza así como en otras partes del cuerpo. Ante las sospechas de un caso de maltrato, la Xunta puso en marcha el protocolo habitual. Se encuentra bajo la tutela de la administración. L

 

os letrados esperan recibir los informes relacionados con la investigación, entre los cuales se encuentra el reconocimiento de la cuna del bebé. Tras esta declaración, la defensa pretende llamar a declarar a más pediatras, que atendieron al bebé y que le hicieron un seguimiento médico, tanto en el centro de salud Nóvoa Santos como en el de A Cuña.

Un pediatra dice que no apreció "nada raro" en el bebé presuntamente maltratado