La Policía Local de Sanxenxo ha clausurado un gimnasio en el municipio que, a pesar del estado de alarma por el coronavirus, mantenía su actividad y pedía a sus clientes, mediante un cartel en su puerta, que entraran sin llamar. Fue un vecino el que alertó a la Policía Local de que este gimnasio, situado en la zona de Xunca Blanca (Vilalonga), estaba abierto y de él muchas personas entraban y salían con mochilas de deporte.
Al llegar, los agentes comprobaron que en la puerta de acceso al gimnasio había un cartel en el que se indicaba que se accediese al local sin timbrar. Dentro, los agentes descubrieron que las luces estaban encendidas y que en el sótano del local había una persona realizando ejercicio con pesas. El propietario del local se encontraba en una sala anexa realizando un masaje terapéutico.
Tras la orden del cierre del gimnasio, la Policía Local realizó dos propuestas de sanción, una para el propietario y otra para el usuario del gimnasio, por incumplir el decreto en el que se declara el estado de alarma para limitar la propagación y el contagio del coronavirus. Con esta nueva infracción, Sanxenxo suma siete sanciones por saltarse las normas de confinamiento dictadas por el gobierno de España decretadas por la pandemia del coronavirus.