jueves. 28.03.2024

El narco Marcial Dorado, acusado de blanqueo de capitales procedentes de la droga, ha asegurado hoy que su dinero es "muy lícito" y que esto lo sostendrá mientras le quede vida porque ha prometido a su hijo pequeño que su padre no se dedica al narcotráfico, como sostiene la Fiscalía. "El dinero es muy lícito y eso lo diré hasta que me quede algo de vida y lo seguiré diciendo por mucho que me quieran decir y muchas condenas que me quieran meter. Yo nunca me he dedicado a la droga, no he vendido tabaco a empresas que se dedicaban a la droga", ha asegurado Dorado durante la tercera sesión del juicio por blanqueo de capitales que se celebra en la Audiencia Nacional.

 

El considerado por la fiscal, Cristina Toro, como "histórico" narcotraficante gallego, que ya cumple una condena de 10 años de prisión por tratar de introducir en España casi ocho toneladas de cocaína en el barco South Sea, se enfrenta a una petición de 15 años de cárcel y a una multa de 42 millones de euros.

 

Hoy Dorado ha negado los hechos que se le imputan y ha dicho que nunca reconocerá haber encabezado un entramado de diferentes empresas, algunas de ellas ubicadas en paraísos fiscales, para blanquear dinero procedente del narcotráfico, porque él a lo que se dedicaba era a la venta de tabaco en puertos francos y al "duty free". Ha admitido tener cuentas bancarias en Suiza pero ha negado que él fuera el responsable de los movimientos que se hacían de unas cuentas a otras -técnica utilizada según la Fiscalía para blanquear dinero- porque, según ha ironizado, él fue "al colegio del PSOE" y tuvo "poca escuela en contabilidad".

 

Dorado ha asegurado que lo que le preocupaba era "obtener el máximo rendimiento" del "muchísimo dinero" de la venta de tabaco y, por eso, contrató en 1997 al gestor de fortunas en Suiza, Vicenzo Liparulo, junto al que, según la fiscalía, en menos de un mes ingresó en metálico tres millones de euros en el BNP Paribas, extremo que ha negado el acusado. Sobre el premio de lotería que ganó en 1998, Dorado ha negado que fuera una ficción para blanquear dinero, como sostiene la fiscal, y ha afirmado que los cinco boletos premiados los encargó a un bar de hinchas del Celta de Vigo, donde juega a la lotería "desde hace 20 o 30 años".

 

Además, ha asegurado que cobró el premio el día del sorteo y no nueve días después, como afirma la acusación, y que tras ello repartió los billetes de lotería entre tres de sus hijos, que se enfrentan a una pena de seis años de cárcel y se sientan en el banquillo junto a otros diez acusados, para los que la Fiscalía reclama penas que oscilan entre cinco y doce años de prisión. Antes de Dorado, ha declarado el matrimonio compuesto por Sara Sánchez Rodríguez y José Manuel Sánchez Zabala, que han reconocido ser los administradores de Programallo, la empresa cabecera del entramado societario en el que presuntamente Marcial Dorado depositaba el dinero de Suiza para luego adquirir otros bienes.

 

Los dos procesados, que se enfrentan a una pena de 6 años de cárcel y una multa de 22 millones de euros, han apuntado directamente a Marcial como responsable de la organización y han dicho conocer que el dinero tenía "origen ilícito", es decir, que provenía del narcotráfico. "Marcial era quien dirigía todo lo que ocurría y me daba las instrucciones de todo lo que tenía que hacer", ha asegurado Sánchez Rodríguez, que por decisión del tribunal que preside Manuela Fernández Prado no tendrá que asistir al resto del juicio por motivos de salud.

El narco Marcial Dorado: "el dinero es lícito y lo diré mientras me quede vida"