Las farmacias de Pontevedra han iniciado este lunes una campaña de cribado masivo entre menores de 12 a 17 años, una iniciativa que según los organizadores no tiene precedentes en España y que busca detectar asintomáticos en edades tempranas.
La presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Pontevedra, Alba Soutelo, entiende que este cribado es "mucho más difícil" que el realizado por estos establecimientos entre la población de 40 a 64 años porque "todos sabemos en qué pensamos a esas edades".
Ha señalado que estas pruebas son "importantísimas" para cortar la cadena de transmisión de la covid-19, ya que los niños y los adolescentes "son los mayores transmisores silenciosos" y en sus ámbitos familiares "hay muchos padres y abuelos aún sin vacunar".
Podrán participar en este cribado los 51.479 jóvenes de edades comprendidas entre los 12 y los 17 años que tienen tarjeta sanitaria en Pontevedra, quedando excluidos los que sean de mutuas privadas o que hayan pasado la covid-19 en los últimos tres meses.
A los menores se les realizará un test de antígenos por PCR, cuyos resultados se analizarán.
Cada farmacia podrá incorporar al cribado a un máximo de 20 menores cada día que, con el consentimiento firmado de sus padres, tendrán que recoger un bote para depositar su saliva, siempre en ayunas, sin beber agua y sin haberse lavado los dientes.
Las muestras de saliva serán trasladadas a través de los canales de distribución farmacéutica al laboratorio de Microbiología del área sanitaria de Vigo, en donde serán analizadas por PCR mediante la técnica de pooling.
Los resultados se comunicarán directamente a cada paciente, a través del número de teléfono móvil que el farmacéutico haya indicado en la aplicación.
Las farmacias pontevedresas esperan que esta iniciativa tenga el mismo éxito que la desarrollada en la población de 40 a 64 años, entre los que se detectaron 74 positivos de las 40.460 personas que se sometieron voluntariamente a las pruebas.