Los trabajadores de Elnosa protagonizarán un "escrache" ante la casa del alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, el próximo sábado 13 de mayo para reclamar la continuidad de la clorera en la ría de Pontevedra, según ha avanzado hoy el presidente del comité de empresa, Avelino García. En una rueda de prensa celebrada en Pontevedra, García ha explicado que los trabajadores han decidido retomar las movilizaciones ante el "silencio administrativo" que aprecian con respecto a la situación legal de la clorera, a seis meses de que venza la concesión que les permite mantener su actividad en Lourizán.
El "escrache" estará precedido de una manifestación que partirá a las diez de la mañana de las instalaciones de la empresa y que incluirá concentraciones ante la delegación de la Xunta en Pontevedra y ante el Ayuntamiento de Pontevedra. El presidente del comité de empresa de Elnosa ha asegurado que los trabajadores "sufrimos los escraches" por parte del gobierno municipal "los 365 días del año", por lo que consideran "necesario" protagonizar esta concentración en las proximidades de la casa del alcalde.
Esta será la primera de la nueva campaña de movilizaciones que se celebrarán en los próximos meses, con el objetivo de lograr la continuidad de Elnosa en la ría de Pontevedra. "Estamos en una situación límite", ha asegurado el representante sindical, porque los plazos "son cada vez menos". Avelino García ha reclamado al Gobierno el "mismo tratamiento" que ha recibido Ence, al recibir una prórroga por la que la Dirección General de Costas les permite seguir ocupando terrenos en dominio marítimo-terrestre. Este trámite, que actualmente ven "parado", sería "fundamental", ha explicado, para que la Xunta pueda conceder una nueva autorización ambiental integrada.
Además, los trabajadores también se dirigirán a la compañía lusa CUF, propietaria de Elnosa, para conocer en qué estado se encuentra la redacción del plan sectorial que les permita obtener el carácter supramunicipal, lo que evitaría el "freno" del Ayuntamiento de Pontevedra a su continuidad. La empresa baraja, según Avelino García, "todas las posibilidades de cara al futuro" a pesar de que mantiene su pretensión de invertir 50 millones de euros en Pontevedra para eliminar el mercurio en el proceso de elaboración del cloro, tal y como establece la normativa europea.