domingo. 23.03.2025

Dos estudios liderados por investigadores de la Universidade de Santiago de Compostela (USC) están marcando un antes y un después en el diagnóstico y tratamiento de las infecciones pulmonares en la infancia. Los trabajos, dirigidos por los profesores Antonio Salas y Federico Martinón, han identificado biomarcadores transcriptómicos capaces de diferenciar con gran precisión las causas de la neumonía pediátrica, lo que permitirá optimizar los tratamientos y reducir el uso innecesario de antibióticos.

Un paso adelante en el diagnóstico

La neumonía sigue siendo una de las principales causas de mortalidad infantil en el mundo, con aproximadamente 1,4 millones de muertes anuales en menores de cinco años, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Un diagnóstico preciso es crucial para garantizar un tratamiento adecuado y evitar la automedicación con antibióticos, una de las principales causas de la resistencia antimicrobiana.

Uno de los estudios, publicado en la revista iScience, ha identificado una firma transcriptómica de cinco biomarcadores que permite diferenciar entre neumonía viral y bacteriana en niños. Esto supone un avance clave, ya que evitará la prescripción innecesaria de antibióticos en casos donde la infección sea de origen viral, contribuyendo así a frenar la creciente crisis de resistencia a los antimicrobianos. “Estamos dando un paso de gigante en el uso de marcadores moleculares para la detección de infecciones, lo que mejorará considerablemente el manejo de la neumonía infantil”, destaca el profesor Salas.

Inteligencia artificial y medicina personalizada

En el segundo estudio, publicado en Nature Communications, los investigadores han desarrollado una metodología basada en el machine learning para analizar más de 1.000 firmas transcriptómicas y diferenciar infecciones por Mycoplasma pneumoniae de otros tipos de neumonía. Esta bacteria, responsable de neumonías atípicas en niños y jóvenes, ha generado preocupación a nivel global debido a recientes brotes en China y Europa.

El uso de inteligencia artificial permitió al equipo identificar conjuntos de entre 3 y 10 biomarcadores con una precisión diagnóstica "casi perfecta", según los investigadores. "Esto nos permite tomar decisiones más informadas en la práctica clínica, evitando diagnósticos erróneos y tratamientos inadecuados", señala el profesor Martinón. Además, abre la posibilidad de desarrollar pruebas rápidas que podrían estar disponibles en farmacias en un futuro, al igual que ocurre con los test de gripe o COVID-19.

Impacto global y futuro de la investigación

Los estudios han sido llevados a cabo por un equipo interdisciplinario europeo en el que participan hospitales y universidades de España, Reino Unido, Alemania y Grecia. En los próximos meses, los investigadores continuarán validando sus hallazgos en cohortes más amplias y diversas, con el objetivo de adaptar estas técnicas a distintos contextos geográficos y poblacionales.

El profesor Salas subraya que "las ciencias ómicas están revolucionando la medicina personalizada, permitiendo diagnósticos más precisos y tratamientos adaptados a cada paciente". Con la posibilidad de que estas tecnologías se integren en la práctica clínica en los próximos años, el futuro del tratamiento de las infecciones pulmonares infantiles podría cambiar drásticamente, beneficiando a miles de niños en todo el mundo.

Avances de la USC revolucionan el diagnóstico y tratamiento de infecciones pulmonares...