El servicio de Urología del Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña (CHUAC) ha desarrollado una técnica para el tratamiento quirúrgico de tumores y patología del riñón y la glándula suprarrenal que es única en España y ha suscitado ya el interés de médicos de varios países.
Esta técnica se realiza en quirófano mediante videocirugía y desde el exterior del cuerpo a través de una sola incisión o puerto único de tan solo tres centímetros, sin entrar en la cavidad abdominal empleando una cámara e instrumental específico.
"Es una técnica compleja, mínimamente invasiva, ya que accedemos directamente al compartimento renal mediante retroperitoneoscopia; eso en condiciones normales es una cavidad que no existe, es un espacio virtual, hay que generarlo y lo hacemos con gas para evitar meternos en la cavidad abdominal y dañar otros órganos", explica en una entrevista con Efe el urólogo Darío Vázquez Martul.
Vázquez Martul (A Coruña, 1984) es médico adjunto del servicio de Urología del CHUAC, dirigido por el doctor Venancio Chantada, una de las unidades de urología a nivel nacional con una de las carteras de servicios más amplias en cirugía mínimamente invasiva, parte de ellas defendidas y premiadas este mes en el Congreso Nacional de Urología.
Cuando se practica una laparoscopia se moviliza el intestino, el hígado a veces, pero con este abordaje "no hace falta", detalla el urólogo coruñés, de manera que "no se generan después fibrosis o adherencias, es una ventaja", resume.
La incisión se realiza en un costado del paciente y, con material específico, una cámara y unas pinzas curvas, opera por esa única incisión, por la que se extraen tumores suprarrenales de hasta ocho centímetros, incluso ha operado y extraído un riñón con múltiples tumores por una incisión de menos de cuatro centímetros.
El CHUAC ha hecho hasta el momento unas 25 intervenciones de abordaje mediante retroperitoneoscopia con una única incisión, "a nivel nacional somos el único hospital que lo hace", subraya el urólogo.
"Y extirpar solo el tumor preservando el resto del riñón somos el único hospital de Europa que lo hace", abunda el doctor Vázquez Martul, que destaca que la mayoría de pacientes recibe el alta en menos de 24 horas con un posoperatorio prácticamente sin dolor.
Por eso ha recibido peticiones de compañeros de otros países Europeos, también de México, para interesarse por esta técnica e iniciarse en ella.
"De momento, por el covid, no hemos podido ir, pero el interés existe", señala.
La única limitación en este tipo de cirugías es el pequeño espacio en el que se puede trabajar, limitado por el tamaño del tumor u órgano a extirpar, por lo que si las lesiones alcanzan los 10 centímetros no tiene sentido una incisión por la que no quepa el órgano. "Ahí perdería sentido el concepto", matiza.
"En España no se hace en más centros por la complejidad", abunda el urólogo, que realiza todas las intervenciones únicamente con un asistente. "La complejidad es la pericia y habilidad del cirujano para realizar la cirugía", zanja.
Vázquez Martul prevé que en dos o tres años aterrizarán en Europa nuevas plataformas robóticas de puerto único, que de momento solo se emplean en Estados Unidos, y se generalizarán entre los cirujanos.
"De momento la técnica aquí como tal es cirujano-dependiente", concluye.
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