El Servicio de Radiología del Hospital Clínico Universitario de Santiago de Compostela (CHUS) se llenó de color y sonrisas en la esperada entrega de premios del concurso de dibujo infantil “Siéntete Radiólogo por un Día”.
La iniciativa, enmarcada en las celebraciones del Día Internacional de la Radiología 2024, invitó a niños y niñas de entre 6 y 11 años a sumergirse en el fascinante mundo de la radiología a través de sus dibujos, en una experiencia educativa diseñada para humanizar la radiología pediátrica y hacerla más cercana y comprensible para los más pequeños.
Este concurso no solo fue una competencia de talento artístico, sino una jornada de aprendizaje que permitió a los niños ver la radiología desde una perspectiva amigable.
Cada participante plasmó en sus dibujos cómo percibía las pruebas radiológicas, utilizando su imaginación para interpretar un entorno que a menudo puede resultar intimidante para ellos. Gracias a sus creaciones, los niños no solo se expresaron, sino que también lograron comprender mejor un procedimiento que forma parte de su bienestar y cuidado.
Experiencia inmersiva: pequeños radiólogos por un día
Uno de los momentos más especiales de la jornada fue la actividad “Siéntete Radiólogo por un Día”. Los pequeños artistas, acompañados por profesionales de radiología, recibieron una visita guiada por las instalaciones, donde pudieron ver de cerca los equipos de imagen médica y aprender sobre su funcionamiento.
Con explicaciones adaptadas a su edad, los niños descubrieron cómo los rayos X y otras pruebas radiológicas ayudan a los médicos a cuidar la salud, transmitiéndoles la importancia de estas herramientas de manera sencilla y comprensible.
La emoción de los niños era palpable mientras exploraban las salas y descubrían los secretos de este servicio. Algunos de ellos, fascinados por las grandes máquinas, se sintieron como verdaderos radiólogos mientras observaban cómo se realizaban las imágenes médicas. “Queremos que los niños comprendan que este servicio es seguro y necesario para su salud”, explicó uno de los radiólogos del equipo. La actividad incluyó también juegos interactivos, pequeñas demostraciones y, por supuesto, tiempo para resolver las preguntas de los pequeños, quienes mostraron una gran curiosidad.
Celebración y premios: el arte infantil al servicio de la salud
Al finalizar la jornada, llegó el esperado momento de la entrega de premios, donde se destacaron los mejores dibujos de acuerdo con la creatividad, originalidad y capacidad de interpretación de cada niño. Más allá de los premios, todos los niños se llevaron a casa la experiencia de haber sido radiólogos por un día.
La jornada no solo les permitió aprender sobre el funcionamiento de los equipos de radiología y su papel en el diagnóstico médico, sino que también generó un ambiente de confianza y familiaridad hacia un servicio que suele despertar cierto temor en los más pequeños.
Un paso hacia la humanización de la radiología pediátrica
La iniciativa del CHUS con este concurso de dibujo se enmarca en un esfuerzo por hacer que los servicios hospitalarios resulten menos intimidantes para los niños, y este evento en particular ha demostrado ser un éxito en ese sentido. Al brindarles un espacio para expresarse y conocer el entorno hospitalario desde una perspectiva lúdica, el hospital contribuye a que los pequeños vean la radiología como una aliada de su salud.
El Servicio de Radiología del CHUS agradeció la participación de todos los niños y familias que se sumaron a esta propuesta, destacando la importancia de promover actividades que acerquen el mundo de la medicina a los más pequeños de una forma amena y educativa. Sin duda, esta jornada de creatividad y aprendizaje ha dejado huella en los corazones de estos jóvenes artistas, quienes salieron del hospital muy contentos y con una visión positiva de su paso por el servicio de radiología.