La “XXXVII Reunión de la Sociedad Española de Neurocirugía Pediátrica” se clausuraba esta mañana en la facultad de Medicina de la Universidad de Santiago. A lo largo de tres días un centenar de especialistas procedentes de diferentes puntos de España, Portugal e Italia pusieron en común sus conocimientos y experiencia en este campo, con el fin de dar a conocer los avances más recientes que contribuyan a hacer frente a patologías graves frecuentes en niños.
En la jornada de hoy se abordó la cirugía de la epilepsia en menores. Entre los expertos participantes, intervino la doctora Carla Frieiro, neurocirujana de la Unidad de Epilepsia del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS), que en la actualidad es una unidad de referencia en toda España, hasta el punto de que les derivan pacientes de otros centros hospitalarios del país.
La doctora presentó la experiencia del CHUS en este campo, en particular la utilización de un estimulador vagal. Explicó que a los niños que no son capaces de controlar sus crisis epilépticas por medio de varios fármacos, se les implanta una especie de marcapasos en el nervio vago, situado en la región cervical. Permite controlar las crisis mediante la emisión de impulsos al cerebro.
Tal como indica la experta, “este dispositivo se utiliza en niños que presentan epilepsias patológicas, es decir, que tienen epilepsias asociadas a otras patologías como diferentes síndromes, parálisis cerebral, hemorragias infantiles, desarrollo intelectual bajo, retraso psicomotor… Son pacientes a los que les resulta muy complicado controlar las crisis”. En la mayoría de los casos este sistema se complementa con la administración de fármacos, aunque los expertos buscan que se llegue a abandonar su consumo o al menos reducirlo notablemente. De este modo se logra disminuir el número de crisis epilépticas y, en consecuencia, mejora la vida de los pacientes, que además son niños.
“El nervio vago es un nervio muy sensible. Y el dispositivo es una especie de hélice que hay que enrollar sobre el nervio, implantando el electrodo por medio de cirugía. Lleva una batería que se coloca en la axila del paciente y que va conectada con el cuello por debajo de la piel” -explica la doctora Frieiro-.
En la Unidad de Epilepsia del CHUS ya se ha implantado este dispositivo a 28 niños procedentes de toda Galicia y de otros puntos de España. “Es un sistema muy seguro, sin apenas efectos secundarios. Además, se le van incorporando avances, como un imán que los padres pueden colocar en la batería cuando detectan que el menor va a sufrir una crisis; con lo que se consigue que finalmente no se desencadene. Es el sistema más eficaz que existe en la actualidad para tratar a niños con epilepsias graves” -asegura la doctora-.
Grandes avances para tratar malformaciones del sistema nervioso en niños
El presidente del comité organizador de esta reunión médica es el doctor Miguel Gelabert, jefe del Servicio de Neurocirugía del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago y profesor de Neurocirugía de la facultad de Medicina de la Universidad de Santiago. Explica que a lo largo de este encuentro se han abordado varias malformaciones en el sistema nerviosos de los niños y, entre las conclusiones que se han extraído, destaca que “la cirugía antenatal en fetos afectados de espina bífida reduce de manera importante la incidencia de hidrocefalia en estos niños, mejorando así mismo su futuro rendimiento escolar”.
Por otro lado, el doctor indica que “las técnicas endoscópicas, es decir, a través de pequeñas perforaciones en el cráneo, han demostrado ser el mejor tratamiento para niños con hidrocefalia, ya que evitan las complicaciones que acompañan al empleo de válvulas”.
El doctor Gelabert apunta además que “la monitorización neurofisiológica, esto es, del funcionamiento eléctrico del sistema nervioso, es muy relevante durante la cirugía, con el fin de prevenir lesiones nerviosas en niños sometidos a neurocirugía”. Y apunta que las técnicas de realidad virtual y “machine learning” se están postulando como fundamentales en la toma de decisiones de cirugía, permitiendo una mejor selección de pacientes que deben someterse a una operación quirúrgica.
Los expertos reunidos en Santiago han puesto de relieve que la estimulación en el cuello del nervio vago se ha estandarizado como técnica de primera línea para el tratamiento de la epilepsia rebelde infantil. Aconsejan su implante lo más precozmente posible para evitar que las crisis puedan aumentar el daño cerebral en el niño.