jueves. 18.04.2024

La Consellería de Sanidad tendrá que indemnizar con 32.000 euros a un matrimonio de Ferrol por haber tardado dos años en comunicar el resultado de un cribado neonatal de fibrosis quística, según ha anunciado hoy la asociación El Defensor del Paciente. En un comunicado, ha desvelado que "la madre tuvo que interrumpir su segundo embarazo al enterarse dos años más tarde de que la prueba había dado positivo para dicha enfermedad". La pareja "presentó reclamación patrimonial contra el Sergas por daños y perjuicios derivados".

 

El Defensor del Paciente ha señalado que los hechos datan de enero del 2011, cuando "un joven matrimonio", tras "nacer su primer hijo", quedó "a la espera de los resultados del cribado de metabolopatías". "Al parecer, por razones técnicas nunca explicadas a los padres, se iba a demorar más que el resto de pruebas; lo normal es que dicho resultado no vaya más allá de días", ha considerado. Posteriormente, en el marco de una "vida absolutamente normal" con su vástago, la madre quedó embarazada "sin sospechar que su primer hijo padeciese dolencia alguna".

 

La entidad ha relatado que en diciembre del 2012 "se les comunicó que el resultado de las pruebas metabólicas del cribado neonatal era positivo para fibrosis quística". La madre se sometió "de forma urgente" a las pruebas "para detección en el feto como posible portador de dicha enfermedad, las cuales resultaron positivas", por lo que "se vio obligada a interrumpir el embarazo en una clínica de Madrid". La afectada, P. I., "fue tratada por sufrir cuadros de ansiedad y un trastorno adaptativo, que requirieron atención especializada".

 

Según El Defensor del Paciente, estos hechos provocaron "un grave daño moral a los dos cónyuges, que ya se habían planteado tener su segundo hijo, lo que afectó gravemente a la pareja incluso a nivel laboral". Además, procedieron a extremar "los cuidados del primer niño, que hasta ese momento fue criado como completamente sano". La asociación ha subrayado que Sanidad "reconoce no solo el transcurso de casi dos años para informar a los padres del resultado, sino que tampoco se ofreció explicación plausible por parte del laboratorio". En su resolución, ha estimado que "la demora e

Sanidad indemnizará a un matrimonio al tardar dos años en resolver un cribado neonatal