Los sindicatos médicos CESM y O'MEGA, denunciaron en un comunicado la "la precaria situación de los servicios de urgencias" de los hospitales y la "preocupante situación de la atención primaria", en sendas cartas enviadas al conselleiro de Sanidad, Jesús Vázquez Almuiña.
En un comunicado, los dos sindicatos, en representación del colectivo de facultativos del Sergas, indican haber enviado cartas a Almuiña para alertar de la situación, incluido también en atención pediátrica, y consideran que eso supone un "factor agravante de lo que está aconteciendo en los servicios de urgencias de toda Galicia".
En sus denuncias, los sindicatos hacen hincapié en "la dejadez o, peor aún, la incapacidad de todo el conjunto de directivos y gerentes de poner fin a una situación que se repite año tras año".
En urgencias de los hospitales gallegos hay "acumulación casi constante de pacientes en los pasillos y pendientes de atención" con casos de "demoras de más de 8 horas", señala en una de las cartas. Añade que algunos pacientes ya atendidos y pendientes de ingreso, al no ingresar en "un tiempo prudencial, se están acumulando en los servicios de urgencias, dificultando el normal funcionamiento de los mismos así como el trabajo de los profesionales".
Los sindicatos advierten al conselleiro de que esa acumulación de pacientes "demuestra una clara falta de previsión y organización, desde el momento que nos consta la existencia de camas cerradas en los diferentes hospitales del Sergas".
En ese sentido, piden "habilitar todos los medios, tanto humanos como materiales, y todas las camas disponibles, para evitar que los servicios de urgencias se conviertan en un gran deposito de pacientes y se dificulte el normal funcionamiento de los mismos". Respecto a atención primaria, observan que la situación "es la peor desde hacer muchos años, por ser la gran perjudicada" por la creación de áreas de gestión "sin contar con los profesionales". Denuncian que "al incremento notable de la demanda asistencial que está teniendo y la falta de sustitutos, se suma la nefasta organización en la cobertura de las ausencias".
Los sindicatos indican que "todo ello está ocasionando que las consultas, tanto de medicina de familia como de pediatría, estén sobresaturadas y, en consecuencia, se esté obligando a que los usuarios acudan a los servicios de urgencias" en busca de "una solución que podrían haber obtenido en sus centros de salud".
Consideran que "tal es la magnitud del problema, que esto ha provocado que algunas gerencias tuvieran que denegar, a los facultativos, las vacaciones o los días de libre disposición que legalmente les correspondían, incluso llamándolos a sus casas para que se incorporaran a sus respectivos puestos de trabajo". CESM y O'MEGA enfatizan que "los grandes perjudicados son los usuarios y también los facultativos, los dos pilares del sistema" y critican que "quienes debieran solucionar esta situación están disfrutando de sus vacaciones, sin cortapisas, junto con sus familiares y amigos".