El alcalde de Santiago, Agustín Hernández, ha apostado hoy por la potenciación y la dinamización del comercio local de la capital de Galicia, ya que esto permitirá, ha dicho, impulsar el tejido empresarial. Así lo ha manifestado esta mañana en la presentación de la campaña 'Cremos no noso comercio, cremos na nosa cidade, cremos en Santiago', organizada por el banco SabadellGallego con el objetivo de incentivar el consumo en la ciudad, ya que "si creemos en nuestro comercio creemos en nuestra ciudad".
El director regional de la entidad bancaria, Juan Moríñigo, que acompañó al alcalde durante la visita a uno de los comercios participantes, 'Ultramarinos Cepeda', ha indicado que un total de 450 establecimientos están adheridos a este programa, que permitirá a los usuarios ganar un premio de 3.000 euros. "Creemos que es muy importante potenciar el pequeño comercio, las pymes y los autónomos, el entramado de la economía. Y para eso se empieza con el día a día", ha subrayado Moríñigo.
El directivo ha indicado que esta campaña ya se llevó a cabo en otras ciudades, con muy buena acogida, y que hacerlo en Galicia tiene un significado especial "por lo gallegos que nos sentimos y por lo apegados a Santiago". Hernández, durante su visita a este histórico establecimiento compostelano, abierto desde el año 1888, compró unos pasteles de yema y unas golosinas naturales, por lo que Moríñigo ha afirmado que tiene las mismas opciones de ganar la tarjeta regalo, que obliga a gastar parte del crédito en el establecimiento donde se ha realizado la compra.
A preguntas de los periodistas, Hernández, que no es usuario habitual de estos establecimientos por falta de tiempo, ha apuntado que el Ayuntamiento está analizando las posibilidades existentes para que los comercios del casco histórico no se vean obligados a cerrar sus negocios por el fin de las rentas antiguas. El 31 de diciembre de este año es la fecha tope para todos los contratos anteriores a 1985, y que por tanto se rigen por la Ley de Arrendamientos Urbanos de 1964, ya que los propietarios tendrán entonces derecho a negociar con sus inquilinos un nuevo precio, más ajustado al mercado.
"Espero hacer una reflexión antes de que finalice el año y si es posible crear una medida que cuando menos pueda minimizar ese efecto, teniendo en cuenta que no es una decisión del Ayuntamiento", ha abundado. El regidor local ha detallado que su Gobierno está buscando medidas "compensatorias", ya que modificar la norma no entra dentro de las competencias municipales. Sobre el conflicto de los trabajadores de Linorsa, empresa concesionaria del servicio de limpieza de Santiago, Hernández ha reiterado que su equipo sigue trabajando para poder alcanzar una solución lo antes posible que permita poner fin a este problema.
"Como en cualquier contrato, seremos exigentes con la empresa dentro de la normativa", ha apostillado. Asimismo, ha abogado por la "máxima celeridad", para que, "en las próximas horas sino días", se dé por finalizado un asunto que les preocupa. No obstante, ha apelado a la prudencia para no avanzar detalles sobre si el consistorio está o no manteniendo reuniones con la dirección de la empresa.
