La Universidad de Santiago de Compostela (USC) se ha sumado a la Declaración Internacional por el Futuro del Ártico, que promueve Greenpeace.
El rector en funciones de la USC, Juan Casares Long, firmó hoy el documento en el que la institución académica apoya la creación de un santuario global en el Polo Norte.
La iniciativa demanda un cambio en las políticas internacionales para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero que causan el cambio climático, así como la creación de figuras específicas de protección para los recursos medioambientales en aquel territorio.
Expresa la preocupación por el deshielo, que afecta directamente a los cuatro millones de personas que viven en la región, pero que amenaza a toda la Humanidad, que tendrá que enfrentarse a fenómenos meteorológicos adversos devastadores como consecuencia de esa circunstancia.
La Declaración solicita también la unidad de los gobiernos y entidades internacionales con competencias en la materia para proteger los recursos pesqueros y extremar las medidas de protección en la extracción de petróleo, así como la creación de una red de áreas marinas protegidas y reservas marinas en el Océano Ártico
