jueves. 28.03.2024

El operativo contra el tráfico de drogas iniciando hace un par de semanas por la Policía Nacional en Vigo ha concluido con la detención de una treintena de personas, según han informado este lunes fuentes policiales, que no descartan que el numero de detenidos pueda todavía aumentar.

Durante la operación se realizaron ocho registros domiciliarios en los que se intervinieron cuatro vehículos y una motocicleta, tres armas de fuego, armas blancas y una defensa extensible, once balanzas de precisión, material informático y numerosos teléfonos móviles, más de 20.000 euros en efectivo y diez kilos de hachís y 110 gramos de cocaína.

El operativo comenzó a mediados de mes y en un principio se saldó con ocho detenciones que fueron aumentando progresivamente.

Según desvela la Policía, la investigación comenzó a principios de año, momento en que se recibieron en comisaría numerosas quejas vecinales y llamadas anónimas a la sala del 091, por lo que se constata la existencia de un punto negro de venta de drogas en torno a la calle Xílgaro, 62.

De la investigación se hizo cargo el grupo UDEV y la causa estuvo dirigida por el Juzgado de Instrucción número 4.

Los principales investigados forman parte de un clan familiar dirigido por la madre y dos de sus hijos, de etnia gitana, que eran los proveedores de la sustancia estupefaciente, de la que se abastecían personalmente a demanda, por turnos de trabajo, generando con ello elevados ingresos económicos que repartían entre los miembros de esta familia.

La Policía constató, gracias a la vigilancia desplegada en la zona, que la vivienda del clan estaba continuamente habitada por diferentes personas, bien por los propios vendedores, de forma temporal, bien por quienes custodian la droga, que eran utilizados por el núcleo familiar para su distribución.

Según la Policía, los principales investigados no dudaban en utilizar la violencia e incluso armas para dominar el mercado de la droga, para el cobro de las transacciones y para solucionar todas las desavenencias que pudiera generar su actividad, por lo que a uno de los detenidos se le imputa dos delitos de lesiones.

Tras las detenciones y los registros efectuados, la Policía ha concluido que existía todo un entramado delictivo, con proveedores que se desplazaban con la droga a localidades cercanas, “cocineros” que preparaban las dosis para su venta, guardianes que ocultaban y custodiaban el género y vendedores que lo distribuían en pequeñas cantidades.

Todo lo actuado está en manos del Juzgado de Instrucción número 4 de Vigo, quien mantuvo el secreto de las investigaciones hasta el momento en que pasaron a disposición los detenidos, que quedaron en libertad con cargos. 

El Operativo antidroga iniciado a mediados de mes en Vigo acaba con 30 detenidos